La Gina Sosa es hija de exiliados cubanos que recuerda “las historias de persecución y opresión en la Cuba de Castro eran un tema constante de conversación” (…) en ellas sus padres “me inculcaron este profundo respeto por la dignidad humana y la creencia de que un gobierno que respeta los derechos individuales de sus ciudadanos es un gobierno que gobierna mejor”.

Se puede considerar que ello le motivó a lanzarse al ruedo político en el disputado Distrito 27, aunque reconoce “No soy un político de carrera”, ella comparte la frustración de muchos ciudadanos “sobre el estado de nuestra cultura política”; añadiendo “Nuestro país no puede permitirse continuar tomando malas decisiones porque somos más leales a un partido político que a nuestro país”.

Seguidamente, Sosa aborda lo necesario de contar con líderes íntegros y capaces de valorar que “Estados Unidos es una tierra de oportunidades” (…) “donde una persona puede trabajar duro y ahorrar lo suficiente para abrir su propio negocio”.

Efectivamente, Gina Sosa es una persona convencida de los beneficios que proporcionan a la nación la economía de mercado y la libre empresa, desarrollada éstas en el seno de la más amplia libertad y democracia.

Nacida en La Habana, Cuba, la Sra. Sosa se traslado a los Estados Unidos de América cuando apenas contaba 2 años, fijando su residencia en Nueva Jersey, en donde ella y su familia, tuvieron “la oportunidad de perseguir nuestros sueños en un país libre de opresión y persecución”. Particularmente, Sosa sostiene “crecimos con un profundo sentido de admiración y gratitud por este país”.

Desde el año 1980 la Sra. Sosa reside en la Florida, donde obtuvo una Maestría en Administración de Empresas en la Universidad Internacional de la Florida (FIU).

Su amplia experiencia profesional incluye “dieciocho años trabajando en América Latina y los Estados Unidos, para la Fortune 500 Company Posteriormente, decidió crear su propio negocio para la “producción cinematográfica, en el cual “tuve el honor de producir y dirigir un documental, The Sun Rises On the Truth. (…) Sigue diciendo “El documental cuenta la historia no contada de las Fuerzas Armadas Constitucionales de Cuba anteriores a 1959”. Ella afirma “este documental reforzó mi creencia de que un individuo puede marcar la diferencia”.

Gina Sosa se considera una alternativa viable para lograr su aspiración a representar al distrito 27 en el Congreso Federal, considerando que ella se compromete a promover en el Congreso:

1. El amor y admiración para Estados Unidos de América
2. El fortalecimiento de nuestra economía mediante el apoyo a la expansión de la pequeña y la mediana empresa; así como la creación de nuevos empleos,
3. La mejora en los programas de la educación y la seguridad escolar,
4. El apoyo a nuestros veteranos,
5. La inclusión social.
6. El apoyo a la libertad de Cuba, Venezuela, Nicaragua y de todos los países en los cuales el comunismo hala clavado sus garras
7. Trabajar por el fortalecimiento de la Democracia y la Economía de mercado en América Latina,
8. Apoyar y colaborar con las organizaciones internacionales responsables, y
9. Reformar y ordenar nuestro sistema de inmigración quebrado.

Resumiendo, Gina Sosa afirma que la motivación esencial que la inspiró a involucrarse en esta carrera por representar al Distrito 27 ante el Congreso Federal, fue «Mi amor por este país, el restablecimiento de sus valores y tradiciones; y, fundamentalmente y la recuperación de la confianza del ciudadano en las instituciones republicanas».

Por último, Sosa recuerda la cita de Edmund Burke, «lo único necesario para el triunfo del mal es que los hombres buenos no hagan nada».