Diferencia entre liberal, libertarista y libertario

POR , EN POLÍTICA Y ACTUALIDA— 20 OCT, 2013

Aunque conocía que la palabra “libertario” en U.S.A. (en inglés “libertarian”)  tenía una connotación diferente al que le solemos dar en Europa, no fue hasta la lectura deun anodino comic de Peter Bagge que me animé a analizar más esa diferencia.

Cuando nos referimos a un “liberal” estamos hablando de una persona que se siente miembro de la tradición iniciada por John Locke y Adam Smith. Según esta línea de pensamiento el estado tiene como único fin proteger los derechos individuales de los miembros de la sociedad; el mejor estado es el que menos interviene. El liberalismo clásico es reacio a un estado fuerte y a gravar con altos impuestos a los ciudadanos; sin embargo tanto en Europa como en EE.UU. el término “liberal” ha perdido su antigua connotación ya que los partidos teóricamente liberales (como el partido republicano en EE.UU. o el P.P. en España) se han aliado con corrientes ideológicas conservadoras que traicionan la misma esencia del liberalismo. Efectivamente, mientras que el liberal es muy celoso en la defensa de los derechos individuales, los conservadores se creen en el deber de “moralizar” a la sociedad según su particular perspectiva. Para conseguir esto los conservadores no dudan en fomentar leyes irrespetuosas con los derechos individuales o en fortalecer el estado para inculcar su proyecto ideológico en la población. Por contra, un liberal estricto considera que los comportamientos privados (religión, consumo de drogas, sexualidad, posesión de armas…) no deben ser perseguidos si no son un riesgo objetivo y actual para el cuerpo social. Como dije, la alianza entre liberales y conservadores ha menoscabado profundamente la esencia antiestatalista del liberalismo.

En este contexto es en el que surge la necesidad de reivindicar el pensamiento liberal en toda su radicalidad, así surge el libertarismo que traduce el término “libertarian” anglosajón. El libertarismo sigue considerando que el estado debe ser mínimo y que comportamientos como el consumo de drogas, la posesión de armas o la poligamia no deben ser ni legal ni moralmente censurados siempre que respeten las libertades del resto de la población. El libertarismo tiene posturas que serían consideradas “de izquierda” en muchas controversias actuales como el aborto o la eutanasia pero en lo económico suelen defender el capitalismo y su ideología del laissez faire hasta el último extremo.

Se traduce “libertarian” por libertarista para no confundirlo con el término libertario que en Europa es sinónimo de anarquista, con tal uso será utilizado en este artículo. Al igual que el libertarismo, el movimiento libertario es firme defensor de los derechos individuales siempre que estos no dañen al colectivo; pero, y en esto se distancian de los “libertarians” estadounidenses, también consideran que la libertad de empresa y de propiedad pueden ser un grave obstáculo a la libertad individual. Efectivamente, como sostenía Rousseau en “El contrato social” (libro II, capítulo 11)  no es posible la libertad individual en un grupo humano en donde unos  sean tan pobres que se vean forzados a venderse y en donde otros tan ricos que puedan comprar la voluntad de sus conciudadanos. El libertario se opondrá a las grandes desigualdades económicas ya que suponen una puerta abierta a la esclavitud, igualmente será un movimiento muy combativo con las prácticas monopolistas en general. En este sentido el movimiento libertario, al contrario que el libertarismo, es un movimiento anti-capitalista.

El dilema que se le plantea tanto al libertarista como al libertario es de qué manera y quién va a evitar las prácticas monopolistas y el enriquecimiento desmedido e ilegítimo. El libertarismo, que cree en el estado mínimo, puede considerar que una de las pocas funciones del estado es precisamente defender al individuo frente a las prácticas monopolistas y acumulativas que pongan en riesgo su libertad. El movimiento libertario, que no cree en el estado en absoluto, promueve otro tipo de economía y empresa distinta a la capitalista, este tipo de tejido productivo, cooperativista y reticular, impediría, por sí mismo, los monopolios y el enriquecimiento desmedido. Al mismo tiempo, y en esto el libertario y el libertarista coinciden, las asociaciones de individuos concienciado serían un importante freno para las prácticas empresariales lesivas a la libertad individual.

Libertarismo y anarquismo coinciden en su lucha contra el estado, al que consideran enemigo de la libertad. Efectivamente en la historia reciente vemos como las estructuras estatales fuertes han devenido fácilmente en totalitarismo, sin embargo hoy no solo es el estado el enemigo de nuestra libertad sino también las empresas monopolistas y transnacionales que, en muchas ocasiones, utilizan el poder del estado como mera cadena de transmisión para imponer sus intereses. Hoy la lucha libertaria y libertariana en defensa de la libertad individual, ya hablemos de libertad política o libertad de modos de vida, no debe contentarse con la crítica al estado sino que debe tener como objetivo de crítica también las citadas agrupaciones transnacionales. En este sentido me resulta más coherente la propuesta libertaria que la libertariana que, en algunos casos, parece atacar únicamente la herramienta opresiva (estado) pero no a los que la manejan (poderes económicos).

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Usos_de_la_palabra_libertario

http://www.lasangredelleonverde.com/diferencia-entre-liberal-libertarista-y-libertario/

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.